Autor: whads

El ICIP celebra la disolución de ETA, confirmada el viernes 4 de mayo en la conferencia internacional de Kanbo, en el País Vasco francés, que pone fin a 60 años de existencia de la organización terrorista y abre la puerta a la posibilidad de una verdadera construcción de paz después de décadas de conflicto.
La renuncia al uso de la violencia como medio para alcanzar objetivos políticos es, sin duda, un triunfo de la paz. Sin embargo, la paz positiva va más allá de la la ausencia de violencia y exige la articulación de una convivencia basada en el respeto a las libertades, los derechos humanos y la justicia social. La construcción de una paz global es un camino largo, no sin obstáculos, y es por este motivo que es indispensable que los diferentes actores del conflicto sigan trabajando para superar el daño causado por décadas de violencia y la fractura social. En este sentido, emplazamos a la sociedad vasca en su conjunto y a sus instituciones, así como a las instituciones de los gobiernos español y francés, a hacer todos los esfuerzos necesarios con el fin de alcanzar una plena reconciliación basada en el respeto y el diálogo. Es responsabilidad de todos aprovechar esta oportunidad histórica con el fin de avanzar en el camino deseado. El fin de la actividad de ETA y su desarme previo han sido condiciones indispensables para encarar con éxito este proceso de paz pero también lo es la construcción de una memoria colectiva del conflicto, con un relato que respete e incluya a todas las víctimas. Queda, pues, camino por recurrrir con el fin de superar de manera definitiva y efectiva tantos años de conflicto político y social.
Desde el ICIP hemos defendido siempre la necesidad de utilizar los medios pacíficos para conseguir objetivos políticos y resolver los conflictos. El anuncio de disolución de ETA es la confirmación del camino iniciado por la sociedad vasca de enfrentarse a la transformación del conflicto mediante la palabra.

A lo largo de la historia, las categorías de perdón y reconciliación han estado ligadas al ámbito relacional privado y, en general, fundamentadas en convicciones religiosas. No obstante, a mediados de la década de 1970 aparecen modos de presencia pública de perdón y reconciliación en políticas estatales que tienen que ver con las transiciones de la dictadura a la democracia o del conflicto violento a la paz. Frente a las resistencias a asumir que es posible un perdón público, no se puede ignorar que perdón y reconciliación son ya categorías situadas en lo público.
Este libro pretende cubrir la temática del perdón y la reconciliación en el ámbito cívico, público, desde el enfoque de la reflexión ética filosófica aplicada a lo político, partiendo de la hipótesis de que dichas categorías pueden ser fecundas en ese ámbito. Y asumiendo la condición de que se asuma la perspectiva de las víctimas. Esta reflexión se hace además apegada a realidades de violencia social en las que se están dando iniciativas ligadas al perdón y la reconciliación.
Sobre el autor
Xabier Etxeberria Mauleón es Doctor en Filosofía por la Universidad de Deusto. Catedrático emérito de ética de dicha universidad, en la que ha sido también director del Centro de Ética Aplicada durante 15 años. Es profesor invitado y colaborador en siete universidades de diversos países de América Latina.
Las implicaciones del autor en sus contextos y compromisos (por la justicia, a favor de las víctimas de la violencia y por la paz, con las personas con discapacidad intelectual, con los pueblos indígenas, por la ética en el ejercicio de la profesión) marcan decididamente su producción intelectual que es estimulada por las interpelaciones que recibe de la realidad social.
Algunas de sus obras más recientes son: Por una ética de los sentimientos en el ámbito público, Bilbao, Bakeaz, 2008; Virtudes para convivir, Madrid, PPC-SM, 2012; La educación para la paz reconfigurada: la perspectiva de las víctimas, Madrid, Catarata, 2013.

El Instituto Catalán Internacional para la Paz (ICIP) entregó el pasado martes, 17 de abril, el Premio ICIP Constructores de Paz 2017 al activista Arcadi Oliveres en un acto en el auditorio del Parlament de Catalunya marcado por el recuerdo a los políticos encarcelados o exiliados y por la denuncia del recorte de derechos y libertades que se vive en Cataluña. Arcadi Oliveres ha sido galardonado por su compromiso y su incansable dedicación a la promoción de la paz, la justicia social, los derechos humanos y el desarme, desde una perspectiva universal.
La ceremonia, seguida por trescientas personas, ha sido presidida por el vicepresidente del Parlament, Josep Costa, y el presidente del ICIP, Xavier Masllorens, quien ha mostrado la «consternación ante el retroceso democrático y la preocupación por cada persona que acepta un recorte de derechos y libertades en nombre de la seguridad». Masllorens ha reconocido la trayectoria vital de Arcadi Oliveres y ha destacado la «respuesta valiente, comprometida y contundente ante la injusticia de un sistema económico y de poder que necesita contención y regulación».
En el transcurso de la ceremonia se ha proyectado un vídeo sobre la trayectoria del premiado y posteriormente Arcadi Oliveres ha recogido el premio en medio de una fuerte ovación del público. En su discurso de aceptación, Oliveres ha tenido un recuerdo por la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, y el conseller Raül Romeva, ausentes al acto a causa de su encarcelamiento, y ha calificado de inaceptable la “represión injustificada al proceso de un pueblo que quiere caminar hacia su plenitud política”. Oliveres ha emplazado a continuar la lucha: “Hay que reconocer que a pesar de los deseos de paz no nos encontramos en momentos tranquilos (…). No podemos, sin embargo, desanimarnos, sino que hay que seguir adelante, seguir comprometidos con lo que a todos nos interesa, el progreso de la dignidad humana”.
También el periodista David Fernàndez, que ha glosado la figura de Arcadi Oliveres en un discurso muy emotivo ha hecho un llamamiento a no desfallecer: “Reclamamos la construcción de la paz precisamente en ausencia de ella, que es cuando más es necesario hacerlo”. Fernàndez, también activista y exalumno de Arcadi Oliveres, lo ha definido como una persona “incansable, infatigable e inagotable; desobediente, pacífico y noviolento” y ha añadido: “Arcadi nunca ha aceptado todo aquello que decían que no se podía cambiar, sino que ha ido cambiando todo aquello que no se podía aceptar”. Fernàndez ha destacado también la ética humanista que representa Arcadi, quien nos recuerda que otro mundo es posible: “Arcadi es valor sin precio y paz sin guerra ni injusticia (…), generosidad y bondad al mismo tiempo”.
En la clausura del acto, el vicepresidente del Parlament, >Josep Costa, ha trasladado la enhorabuena a Arcadi Oliveres y ha destacado que “el compromiso de Cataluña con la paz es intrínseco de nuestra historia, un valor fundamental de nuestra sociedad”. Costa también se ha referido a la situación política que vive Cataluña: “Es inaceptable hacer pasar por violento lo que son las legítimas movilizaciones sociales. Cataluña ha apostado siempre por la vía democrática y el diálogo”, ha dicho.
Anteriores premiados
El Premio ICIP Constructores de Paz ha llegado este año en la séptima edición. La primera edición del premio, correspondiente al año 2011, reconoció la lucha de objetores e insumisos, simbolizados Pepe Beunza, primer objetor de conciencia al servicio militar obligatorio por razones ideológicas del Estado español.
El año 2012, el Premio ICIP fue concedido a cinco Madres de Soacha por su trabajo en favor de la paz y los derechos humanos en Colombia. Con este premio, el ICIP quiso reconocer el coraje y la perseverancia del grupo de madres colombianas en la búsqueda de verdad, justicia y reparación por la muerte de sus hijos en manos de las fuerzas de seguridad del Estado y por otros casos de ejecuciones extrajudiciales conocidos como falsos positivos.
El año 2013, el ICIP galardonó al exgeneral nacido en Belgrado Jovan Divjak, por su coraje en la defensa de Sarajevo durante la Guerra de los Balcanes y su trabajo en favor de las víctimas del conflicto.
El año 2014, el Premio ICIP Constructores de Paz recayó en la Women’s International League for Peace and Freedom (Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad, WILPF), por su trayectoria centenaria en el trabajo de mujeres para la paz y el desarme.
Un año más tarde, el 2015, el reconocimiento fue para el padre capuchino Joan Botam, impulsor de numerosas iniciativas vinculadas a la paz y al ecumenismo y un claro defensor de la religión como fuente de paz y diálogo.
Finalmente, el año 2016, el Premio ICIP Constructores de Paz recayó en la organización no gubernamental Brigadas Internacionales de Paz (PBI) por su tarea de protección de los defensores de los derechos humanos que trabajan en áreas de represión y conflicto.
Anteriormente, en octubre del 2011, el ICIP concedió una edición extraordinaria del galardón al Parlament de Catalunya al representar la continuidad y el legado de las instituciones “Pau i Treva” y el “Consolat del Mar”.

El ICIP entregó el pasado viernes 13 de abril los premios del II Concurso de Hip-Hop por la Paz en un acto en la Biblioteca que contó con una representación de cada uno de los grupos ganadores.
La presentación del acto fue a cargo del presidente del ICIP, Xavier Masllorens, y el director general de Joventut, Cesc Poch, quienes reivindicaron el compromiso de los jóvenes participantes con la paz, los derechos humanos y la denuncia de las injusticias. Los equipos ganadores recogieron los galardones y al finalizar la ceremonia un grupo de jóvenes de Lloret representaron en directo su videoclip.
En esta ocasión, el jurado ha elegido los siguientes trabajos:
Modalidad 1 (dirigida a estudiantes de secundaria, bachillerato y formación profesional):
– Primer premio para los alumnos del INS Lauro de Les Franqueses del Vallès con el videoclip «Requiem for a dream». El premio consiste en una sesión de gravación con acompañamiento artístico en el estudio profesional La Conga Music de Sabadell.
– Segundo premio para los alumnos del INS Hug Roger III de Sort con el videoclip «Res a dir, molt per criticar». El premio consiste en un taller de rap impartido por Pau Llonch.
– Mención especial al Institut Escola El Til·ler de Barcelona con el videoclip «El Rap del Til·ler», por el elogio a la diversidad y el trabajo de cohesión de grupo.
Modalidad 2 (dirigida a jóvenes de entre 12 y 25 años vinculados a una entidad):
– Primer premio para la Oficina Jove del Garraf con el videoclip «Gritando al mundo». El premio consiste en una sesión de gravación con acompañamiento artístico en el estudio profesional La Conga Music de Sabadell.
– Segon premio para la Fundació Servei Gironí de Pedagogia con el videoclip «¿De qué lado estás?». El premio consiste en un taller de rap impartido por Pau Llonch.
– Mención especial al Consell Comarcal de l’Alt Empordà con videoclip «Barreras cutáneas» por su calidad y excelencia técnica.
El Concurso ICIP de Hip-Hop por la Paz tiene como objetivo dar visibilidad al compromiso y la creatividad de los jóvenes en el ámbito de la cultura de paz. El certamen cuenta con el apoyo del Departament d’Ensenyament y de la Direcció General de Joventut de la Generalitat de Catalunya.

El jurado de la segunda edición del Concurso ICIP de Hip-hop por la Paz ha hecho público su veredicto después de visualizar la totalidad de las obras presentadas.
Modalidad 1 (dirigida a estudiantes de secundaria, bachillerato y formación profesional):
– Primer premio para los alumnos del INS Lauro de Les Franqueses del Vallès con el videoclip «Requiem for a dream».
– Segundo premio para los alumnos del INS Hug Roger III de Sort con el videoclip «Res a dir, molt per criticar».
– Mención especial al Institut Escola El Til·ler de Barcelona con el videoclip «El Rap del Til·ler», por el elogio a la diversidad y el trabajo de cohesión de grupo.
Modalidad 2 (dirigida a jóvenes de entre 12 y 25 años vinculados a una entidad):
– Primer premio para la Oficina Jove del Garraf con el videoclip «Gritando al mundo».
– Segon premio para la Fundació Servei Gironí de Pedagogia con el videoclip «¿De qué lado estás?».
– Mención especial al Consell Comarcal de l’Alt Empordà con videoclip «Barreras cutáneas» por su calidad y excelencia técnica.
El acto de entrega de los premios tendrá lugar el viernes 13 de abril a las 12:00 horas en la sede del ICIP. Los premios consisten en una masterclass impartida por un profesional del hip-hop y la grabación de la pieza premiada en un estudio profesional.
El Concurso ICIP de Hip-Hop por la Paz tiene como objetivo dar visibilidad al compromiso y la creatividad de los jóvenes en el ámbito de la cultura de paz. El certamen cuenta con el apoyo del Departament d’Ensenyament y de la Direcció General de Joventut de la Generalitat de Catalunya.

Cataluña vive inmersa en una situación política y social de excepción, agravada por los encarcelamientos preventivos de cinco diputados más y la detención del presidente Carles Puigdemont.
Desde el Instituto Catalán Internacional para la Paz, institución que defiende y trabaja para la construcción de paz, los derechos humanos y la resolución de conflictos, condenamos firmemente las detenciones por motivos políticos, como hemos anteriormente a raíz de los hechos del 1 de octubre, y constatamos con preocupación la grave vulneración de derechos políticos y sociales que estamos viviendo. Hay indicios claros de una ruptura de la separación de poderes en el Estado español, que es la base de cualquier estado de derecho. La deriva en la judicialización de un conflicto de naturaleza política no puede ser en ningún caso la vía para su resolución.
Deploramos este debilitamiento evidente de la democracia y, siguiendo el llamamiento a la unidad de acción hecha este domingo por el presidente del Parlament, Roger Torrent, nos ponemos a disposición de las instituciones, partidos y entidades catalanas para trabajar con el objetivo de promover la buena convivencia, arraigada en la justicia y la legitimidad democrática.
Asimismo, apelamos el conjunto de la sociedad catalana a mantener el espíritu pacífico y noviolento en cualquier tipo de reivindicación.
Hacemos nuestra la frase del filósofo y escritor Jean-Marie Muller: “No es la ley la que debe dictar lo que es justo. Es lo que es justo lo que debe dictar la ley”.

Una delegación de la ICIP, formada por el presidente Xavier Masllorens, la directora Tica Font y la técnica de programas Maria Fanlo, ha viajado esta semana a Berna (Suiza) para entrevistarse con responsables del centro de investigación para la paz swisspeace. El objetivo de la visita es conocer de primera mano el funcionamiento del centro, intercambiar experiencias y valorar posibles vías de colaboración en el futuro. Para dar un nuevo impulso al proceso de internacionalización del ICIP, en 2017 el Instituto ya estableció contactos similares con dos centros de paz internacionales: el SIPRI, con sede en Suecia, y el Flemish Peace Institute, con sede en Bélgica.
swisspeace desarrolla actualmente dos líneas de trabajo que son temáticas de interés para el ICIP, según el nuevo Foco de trabajo para el ICIP del 2022 aprobado por la Junta de Gobierno: Dealing with the Past y Business & Peace. El ICIP trabaja estas temáticas en los respectivos programas de actuación Construcción de paz y articulación de la convivencia después de la violencia y Empresas, conflictos y derechos humanos.

Este mes de enerola Biblioteca del ICIP ha ampliado su fondo con nuevas publicaciones, la mayoría de las cuales están disponibles en préstamo. La Biblioteca está situada en la calle Tapineria 10, 1ra planta de Barcelona, y es un centro especializado en temas de cultura de paz, seguridad y conflictos de referencia en este ámbito a Cataluña.
La Biblioteca da apoyo al ICIP y a investigadores y expertos en el campo de la paz, y está en contacto permanente con instituciones y centros similares de todo el mundo. Forma parte de la red de bibliotecas especializadas de la Generalitat y está integrada en el Catálogo Colectivo de las Universidades Catalanas (CCUC).
Consultad el catálogo de la biblioteca.

La Biblioteca del ICIP ha acogido este jueves la presentación del Informe sobre el Estado Efectivo de la Implementación del Acuerdo de Paz en Colombia, elaborado por el Instituto Kroc de Estudios Internacionales de Paz de la Universidad de Notre Dame, un centro norteamericano de investigación que se dedica a la investigación para la paz y está especializado en el seguimiento comparado de procesos de paz y su implementación.
El acto ha ido a cargo de Borja Paladini, representante del Instituto Kroc en Colombia y coordinador de la iniciativa Barómetro de seguimiento de la implementación, y ha contado con la presencia de las directoras del ICIP y la Agencia Catalana de Cooperación al Desarrollo, Tica Font y Carme Gual, respectivamente.
Se trata del primer informe público sobre el estado de la implementación del Acuerdo de Paz en Colombia, suscrito en noviembre del 2016 entre el gobierno colombiano y las FARC y analiza 558 disposiciones o compromisos observables (entre diciembre de 2016 y agosto de 2017), desde enfoques transversales: derechos humanos, género, étnico y territorial. El resultado es un análisis cualitativo, cuantitativo y al mismo tiempo comparativo con 34 acuerdos de paz que se han suscrito por todo el mundo y que también han sido objetivo de estudio del mismo Instituto Kroc. Como conclusiones generales, el informe constata que la implementación de los compromisos adquiridos por el gobierno colombiano y las FARC se está llevando a cabo en 251 disposiciones estudiadas (en diferentes grados), un 45% del total, y que esta implementación está siendo un proceso de diálogo y negociación entre las dos partes. En el 55% restante, la implementación no se ha iniciado. El trabajo también concluye, según ha explicado Borja Paladini, que «la implementación no está estancada, sino que va avanzando, cada mes ha habido un progreso, aunque esta no responda a las expectativas de las partes y de la gente»
En este contexto, Paladini constata que la construcción de paz en Colombia se puede interpretar desde dos ópticas: una más positiva y una más negativa. Como parte positiva, destaca el fin del conflicto armado (alto-el-fuego y abandono de armas); mecanismos de implementación del acuerdo ya efectivos, avances institucionales y en la amnistía de presos; y un ritmo de implementación más rápido que en otros acuerdos de paz. Como parte negativa, el informe destaca la falta de una reforma política y del desarrollo de la Jurisdicción Especial de Paz; la falta de un enfoque de género y étnico; la parálisis relativa al punto del acuerdo en lo referente a la distribución de las tierras; y la falta de efectividad del despliegue de las garantías de seguridad y de protección. En este sentido, Paladini constata que «los asesinatos de líderes y excombatientes continúan y la gente no se siente más segura que antes en los territorios, hecho que es motivo de preocupación».
Como conclusión, Paladini afirma que hay «bases fuertes» para la construcción de paz en Colombia pero «hay que dar respuesta a las preocupaciones porque las señales de alerta pueden llevar a un bloqueo de la paz, ya que los procesos de implementación de los acuerdos son muy frágiles». Asimismo, el representante del Instituto Kroc en Colombia considera que «la paz se tiene que entender como una cosa que se construye desde los territorios» y que «hay que ampliar el alcance de la paz a la población en general, sobre todo a aquellos colectivos más vulnerables y afectados por|para el conflicto violento».

Como parte del proceso de focalización temática, el ICIP ha puesto en marcha el programa de trabajo «Violencias fuera de los contextos bélicos», centrado en aquellas violencias –físicas, estructurales o culturales– que tienen lugar en contextos donde no se considera que haya conflicto armado en el sentido más clásico de la expresión. En el mundo, las personas que mueren de forma violenta son 10 veces más numerosas en circunstancias no bélicas que en circunstancias bélicas. La situación es especialmente letal en América Latina, donde desde el año 2000, 2,6 millones de personas han sido asesinadas. Detrás de estas tasas de mortalidad hay causas estructurales y determinados factores políticos, sociales y económicos que el ICIP se ha propuesto estudiar, entender y dar a conocer.
El tema es vasto y complejo y por este motivo, el ICIP se centrará muy especialmente en torno a estos tres grandes ejes: 1. Causas y consecuencias de las violencias en situaciones que no son conflicto armado; 2. Movilizaciones sociales pacíficas ante las violencias; y 3. Políticas públicas para la prevención de estas violencias. El programa de trabajo combinará acciones de investigación con acciones de transferencia de conocimientos y divulgación y de construcción de paz. La mirada propia del ICIP quedará incorporada. Es decir, se pondrá énfasis en la noviolencia y la seguridad humana, la participación e iniciativas de la sociedad civil, el empoderamiento de las víctimas, la perspectiva de género, en las minorías y en la diversidad.
Uno de los países donde estas violencias tienen actualmente unas dimensiones más preocupantes es México: militarización de la seguridad; narcotráfico y guerra contra el narcotráfico; feminicidios; violencia doméstica y comunitaria; pobreza, desigualdades y exclusiones sociales; graves abusos contra inmigrantes y refugiados; delincuencia común; impunidad de las violaciones de los derechos humanos; corrupción y falta de transparencia; secuestros, extorsiones y asesinatos.
Este escenario hace que la atención del ICIP sea primordial en este país y es por eso que una representación del Instituto viaja a México este mes de enero, con el objetivo de establecer contactos y explorar vías de colaboración con centros académicos, instituciones, entidades, periodistas y expertos en paz, seguridad, violencias y derechos humanos. La visita tendrá lugar entre el 15 y el 19 de enero e incluirá instituciones como Serapaz, Fundar, Insyde, la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, la Comisión Nacional de Derechos Humanos, el Mecanismo de Protección en Personas Defensoras y Periodistas, y UNODC. Durante la estancia, el ICIP también asistirá al Seminario Violencia y Paz del Colegio de México «La paz en México sí se posible». La delegación del ICIP estará encabezada por la directora Tica Font.