Las políticas públicas de seguridad están siendo cuestionadas a nivel local y a nivel global, desde diferentes contextos que presentan una conflictología diversa. Tanto en países con conflicto armado, en países con violencia crónica y también allá donde se puede considerar que no hay un contexto de violencia generalizada, la seguridad es actualmente una noción muy discutida y polemizada porque las estrategias que se despliegan en su nombre no están consiguiendo gestionar eficazmente los conflictos sociales ni prevenir las violencias. De hecho, a menudo limitan libertades y el libre ejercicio de los derechos humanos, y llegan a reforzar las vulnerabilidades ya existentes o, incluso, generar nuevas dinámicas violentas.
Los enfoques clásicos de la seguridad, de corte estatocéntrico y militar, se han visto contestados por una pluralidad de escuelas y de corrientes académicas agrupadas bajo la denominación de “estudios críticos de seguridad” (seguridad feminista, seguridad humana, teoría verde, securitización, emancipación, posestructuralismo, poscolonialismo y decolonialismo…).
En este contexto, desde el área de trabajo «Alternativas de seguridad» del ICIP detectamos dos desafíos estratégicos: la necesidad de facilitar el diálogo entre diferentes aproximaciones de pensamiento a la hora de reflexionar sobre un nuevo modelo de seguridad y, al mismo tiempo, que estas aproximaciones estén conectadas con experiencias prácticas concretas.
Con la voluntad de dar respuesta a estos desafíos, el ICIP ha abierta una convocatoria pública para la elaboración de un informe sobre estudios críticos y prácticas alternativas al modelo de seguridad predominante.
Las personas interesadas en participar en la convocatoria pueden enviar sus propuestas hasta el miércoles 26 de mayo. Las propuestas se deben enviar a la atención de Sandra Martínez, en el correo electrónico smartinez@icip.cat, especificando en el asunto “Informe seguridad”.