El amigo Alfons Banda, vicepresidente del ICIP, artífice de la Fundació per la Pau (ahora FundiPau), luchador constante por la paz, divulgador de la importancia de la cultura de la paz y del papel primordial de la opinión pública en la lucha por la justicia, nos acaba de dejar. Y lo hace hoy, el día que recordamos la muerte de Gandhi y el Día Escolar de la Noviolencia y la Paz, dos cosas en las que ha dedicado muchos afanes desde hace décadas.
Ha muerto sereno, tranquilo, después de una enfermedad corta que se ha mostrado reticente a los tratamientos, con una serenidad, dignidad y valentía al asumir los días finales, siempre para garantizar una gran calidad humana que nos ha cautivado y hemos admirado todos.
Ahora nos invade la tristeza, aunque pensamos que ya estás charlando con tus admirados Gandhi, Joan Gomis o >Sean McBride. Pero también la responsabilidad de saber que tenemos que rematar tu trabajo, seguir tu camino y difundir tu legado. Lo haremos, haremos lo que nos dijiste con ternura en la última Junta de Gobierno del ICIP: «Sé que mis convicciones, ideas y acciones seguirán presentes».
Echaremos de menos tu sonrisa, cierto, echaremos de menos tu capacidad de combinar convicción y análisis, poco habitual. Y echaremos de menos tu firmeza en las exigencias mínimas. Decías que siempre hace falta dialogar y buscar al otro pero, también, a la manera de Walzer, que los requisitos mínimos, las líneas rojas, tenían que ser infranqueables y conocidas al iniciar el debate y el diálogo. Echaremos de menos tu constante perseverancia, gota malaya hasta el infinito, sin desfallecimiento…. sin la cual el ICIP no hubiera nacido. Pero nos quedan muchas y muchas cosas, recuerdos, escritos, gestos, ejemplos.. redes… Mucho.
Sobre todo recordaremos tu demanda de hacer nítida la sombra de la paz, el título de tu blog que aclarabas, siempre profesor: la paz es borrosa, como lo es la sombra de un barco en una imagen… contornos desdibujados. Lo que hace falta, lo que hacías con el blog, es hacer nítida la sombra, explicitar la imagen de la paz, para mostrar su belleza y hacerla alumbrar definitivamente.
Seguiremos persiguiendo, contigo ausente presente, la sombra de la paz… para hacer que sombra y realidad por fin se reencuentren.
¡Gracias Alfons!
Rafael Grasa, presidente del Instituto Catalán Internacional para la Paz

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